¿Y si más bien los dejamos trabajar?

James Rodríguez. Foto FCBayern.com

Hace un par de días hablé con el director de Colmotorfans, Andrés Gutiérrez, quien además fue mi compañero de set durante las transmisiones de las carreras de Gustavo Yacamán que se realizaron por El Tiempo Televisión. Mi compañero de fórmula me decía “yo como ingeniero no puedo decirle a un periodista cómo comunicar, eso sería una falta de respeto”. Hoy que se habla de la salida de Carlo Ancelotti del Bayern Múnich caen como anillo al dedo esas palabras.

Si bien es cierto que “el mr” fue el que puso a James en el Real Madrid carece de toda legitimidad que el técnico haya sido quien puso al cucuteño en la órbita del fútbol europeo. James por méritos propios, por sus actuaciones con el Porto y el Mónaco ya hacía nombre en el viejo continente y sus goles en el mundial de Brasil 2014 fueron los que le abrieron las puertas de los mejores equipos de Europa, pero él en su sueño quería llegar al equipo merengue.

Se habla (porque es eso, solo palabrería) que ahora el 10 de la Selección Colombia deberá ganarse su puesto ante el nuevo técnico que llegue al elenco bávaro. Algunos colegas especulan con que vivirá la misma situación que le sucedió en el Real Madrid y algunos más “osados” (por no decir atrevidos) ya le buscan equipo.

Nairo Quintana. Foto Movistar Team

Misma situación sucedió hace poco con Nairo Quintana. Algunos colegas aseguraban que con la llegada de Landa al equipo español el boyacense tendría ya un pie afuera de la escuadra y hasta lo pusieron en el Sky. Situación que al final no sucedió y Quintana seguirá con el conjunto telefónico.

Si James juega o no, si está en el banco o es titular, si Nairo es capo y va a ganar todo o si por el contrario no va a correr las principales; ni a usted ni a mi como periodistas nos afecta, nos van a pagar lo mismo así ellos actúen o no. 

Es como si Rodríguez y Quintana llegaran al puesto de trabajo de cada periodista y le enseñaran a escribir y a comunicar lo que debe comunicar. Dejémoslos jugar, pedalear y hacer lo que ellos saben hacer. Dejémoslos trabajar y nosotros dediquémonos a comunicar y no a especular.